domingo, 13 de marzo de 2011

11-M-2011

Monumento a las víctimas del 11 de Marzo. (Atocha)
Madrugadores, gente que iba a trabajar, padres, amigos, compañeros, hermanos… Hubo gente a la que le dio rabia no haber llegado a coger ese tren. Unos escucharon por última vez: Que tengas un buen día cariño; Suerte con la reunión; ¡Vamos! Que vas a llegar tarde… Otros no tuvieron esa suerte. Unos iban hablando con su compañero sobre la familia, o el pesado del jefe. Otros iban con su música, quizá echándole alguna miradita a esa chica con la que ya han coincidido más de una mañana. Seguro que un señor, ya mayor, que son los que se fijan en estas cosas, vio a un chico, que no había visto otras mañanas. ¡Oye! ¡Oye,  que te dejas la mochila!

España desayunaba ese día asombrada y triste, Madrid lloraba lágrimas de miedo y desolación. 192 familias se desesperaban, se hundía su mundo, se les partía el alma. Madrid inundaba de sangre los autobuses de donaciones, y todos sus servicios de emergencias se derramaban sobre las estaciones y los trenes. España se vestía de negro, y aunque esa tarde llovió, no cupo más gente en las calles. Y así siete años, sin saber quién ha sido, con monumentos llenos de controversia, con actos conmemorativos en los que no interviene el agonizante gobierno que tenemos... A España se le ha herido, y aún no se sabe ni quién, ni porqué.

Bandera japonesa.
Y de la península ibérica, extremo de Europa, al extremo de Asia. Este mismo viernes Japón sufría la mayor catástrofe natural de su historia. Un terremoto y su consecuente tsunami arrasaban las islas niponas dejando muertos, heridos y desaparecidos. Un suceso que si llega a ocurrir en otro país lo hubiera eliminado del mapa. Este acontecimiento nos enseña, al menos, que la naturaleza es la que manda, por mucho que nos empeñemos en desafiarla. Además Egipto se hacía libre hacía justo un mes. Y exactamente 9 años y medio atrás se hacía la declaración de guerra más sangrienta de la historia en Nueva York. Para reflexionar es el estreno aquí, en España de Torrente 4 en esta misma fecha. Se suele decir que sólo Dios sabe lo que nos depara el futuro, pero hay otra frase de lo más recomendable y cierta: Más nos vale rezar, y que Dios nos pille confesados. Feliz segunda semana de Cuaresma.

4 comentarios:

Rita dijo...

Respecto a que el gobierno no hace nada con el 11M puede ser pero, al menos desde mi punto de vista tampoco es tan sencillo aclarar algo así, los que se vieron en las cámaras de seguridad están muertos por tanto ahora hay que saber quién está detrás, bastante difícil.
Aparte de esto, no fue el Gobierno actual el que se involucró en una guerra (de la que hablas más abajo) con la que muy pocos españoles estaban a favor provocando amenazas de grupos terroristas...
A parte de esto, SÍ, el 11M es un día demasiado trágico, antes para España, ahora para el mundo

David Jiménez dijo...

Rita, en esas elecciones se votó con miedo, y es sospechoso que tanto los trenes como otras pruebas desaparecieran, aparte de hechos cuya mención apuntaría ya a culpables. No quiero dejar patente quién creo que fue, por la gravedad de la acusación y porque está basada en hipótesis y sucesos no probatorios. Sólo digo, que después de 7 años, ya va siendo hora de saber cómo, quién y porqué fue el 11-M.

la Dama de Shanghai dijo...

¿Quién sabe quién? ¿quién sabe dónde? ¿quién sabe por qué?. Lo curioso del 11 M es la falta de unidad de las victimas, me pongo en el lugar de una madre, y la verdad, no entiendo a la Sra. Manjón, una vez más, "las dos españas" vuelven a florecer, algo que el Sr. Zapatero se ocupa personalmente de regar. Y en el 7º Aniversario, Japón impacta al mundo y nos demuestra su cultura, su saber estar, su elegancia frente a la adversidad. Su semblante aniñado se mantiene sereno, apenas una leve mueca muestra su dolor, trabajan de forma eficaz para conseguir cuanto antes la normalidad, las personas guardan cola disciplinadamente para conseguir agua y alimentos, y en las casas y comercios afectados por el tsunami no hay saqueos... Un ejemplo para el mundo. Gracias Japón.

Akela dijo...

Gracias por recordarnos que la vida pasa, pasa la vida como dice un famoso grupo musical y que en cualquier momento la naturaleza a la que tan poco nos preocupamos por cuidar, puede hacer alguna "tontería" y pillarnos por sorpresa.
En mi humilde opinión, creo que hemos de aprender de los nipones a ser más pausados, tranquilos pero a la vez EFICIENTES.
Un saludo!
ELENA