Por dónde van los tiros

Felipe Juan Froilán al lado de su abuelo el Rey. 

Entre que Putin se suma a Francia a la hora de meterse con España, aquí el nieto mayor de don Juan Carlos I, haciendo oídos sordos a las anécdotas de su abuelo, se dispara en un pie mientras estaba con su padre. Menos mal que abuela y madre hablando para los medios le quisieron quitar hierro al asunto y no dijeron eso de: «Ya se sabe que las armas las carga el diablo», porque eso sí que hubiera sido echarle leña al fuego. No sólo por el divorcio, sino por la edad del «elenístico» nieto cuyo padre le deja manejar escopetas... En el artículo anterior, servidor divagaba sobre la crisis de valores, y es que ahora, este acontecimiento plantea otra cuestión. ¿Son los padres los que no han sabido o querido transmitir esos valores que ellos aprendieron, o son los hijos los que no han escuchado a sus padres? Tendrá que seguir la búsqueda del punto de desunión en esa cadena de transmisión de valores como la educación, la generosidad, el pudor (que no mojigatería), o el simple y esencial respeto. 

Esperanza Aguirre P. de la Com. de Madrid.

Agraciadamente siempre hay quien representa la excepción y hoy salía la noticia de un publicista que hacía su especial donación a los hijos de esta crisis económica. Esos descolgados de la clase media que se ven ahora entre cartones, víctimas del tiempo que les ha tocado vivir y que han pasado de «Este mes no sé ni cómo he podido pagar la hipoteca» a «A ver si hoy me pueden dar de comer en Cáritas», y precisamente el anuncio es para esta organización social de la que realmente sólo se beneficia quien lo necesita. Es una pena que ahora la presidenta de la Comunidad de Madrid pegue el patinazo de subir el transporte público. ¿Quién quería que le subieran el sueldo? ¿Qué huelga ha habido en el metro? ¿Por qué? Precisamente ahora... Hay que tener poca vista. Lo que piensan algunos es que con la cantidad de reformas y movimientos que está haciendo su partido pues ella ha pensado que también tenía que hacer algo. Y estaba bien la sugerencia a Rajoy de que se podía dejar la justicia, la sanidad y la educación en manos del Gobierno, en vez de las duplicidades que hay en todas las comunidades autónomas... Pero se conoce que oía campanas y no sabía dónde. Esperemos que se retraiga cuanto antes, y no de lugar a que se oigan disparos reales. 

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