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| Moneda española de dos euros actualizada por ordenador. |
Llevamos bastante tiempo con las cámaras disueltas y con un Gobierno electo y otro en funciones. Por lo que ya se ha destapado quien manda, y más, en tiempos de crisis. Don Dinero es quien copa la actualidad diaria y comparte portadas con las noticias del mundo árabe. No sé si contentaría a Quevedo que se utilizase así su renombre al sudor de muchos y compañero de pocos. Puede que le gustase más la noticia de que la casa de su más acérrimo enemigo fue “okupada” y ahora incluso se ha incendiado su teatro Albéniz. A los madrileños, desde luego, no nos hace ninguna gracia. Como tampoco nos hizo a ningún español que el Oddisey se llevase todas las monedas que encontró de Carlos III en las profundidades de aguas españolas, en un barco español. Pero según las últimas noticias parece que ya estamos más cerca de recuperarlo. Y es que Don Dinero tiene que ver con todo, que se lo pregunten a los catalanes, que esta vez toca recortar a los funcionarios. Y en Madrid siguen protestando y en huelga los profesores, aunque me parece que poco se pierden esos alumnos por no ir a clase… Y ya va la sexta ayuda a Grecia y lloros en Italia por los recortes…
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| Anuncio de Freixenet 2011. |
Por otro lado, se abren camino entre la programación cotidiana las películas en las que el propósito del antagonista es robar la Navidad, o papá es Santa Claus, o se tienen visiones en las que grandes tiburones de Wall Street ven la familia que podrían tener. Además Sara Baras ya nos está invitando a brindar con cava por unas felices fiestas, y niños y padres leen y releen el catálogo de El Corte Inglés en busca de un consenso entre la ilusión del niño y la capacidad del camello ¿lo cojen? Las bolsas de todo el mundo parecieron recibir un regalo anticipado con esa inyección de dinero esta semana. Rajoy parece llevarse bien con sindicatos y patronal, y Rubalcaba ha dicho querer ejercer una oposición constructiva. Puede que sea por la proximidad de la Navidad, pero esperemos que estos sentimientos conciliadores duren más. Aunque no parecen llegar hasta Irán donde la situación es cada vez de mayor envergadura, o a Siria donde ya no quedan españoles. Lo que está claro es que el poderoso Don Euro, como lo lleva haciendo desde hace tiempo, va a ser un gran protagonista de estas fiestas, pero lo que no está tan claro ni en estos países, ni en el Valle de los Caídos, es que vayan a tener la fiesta en paz.
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