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Si hay alguna lección escondida tras las elecciones catalanas, y que puede que hasta Mas haya visto, es que quien mucho abarca poco aprieta. A partir del mes que viene, y coincidiendo con la transición de mes en fin de semana, este blog vuelve a ser semanal. Así es el devenir de la vida, que por circunstancias unas veces las empresas, hablando en términos de ideas que se ejecutan, se ven abocadas a la retirada a tiempo antes que al descenso en la calidad del producto que ofrece. Es difícil compaginar el día a día de la actualidad con una vida fuera llena de asignaturas que sacar adelante, cursos de locución, tesinas, y prácticas en redacciones de periódicos digitales (véase http://onceu.es/) Soy el primero que se entristece con este descenso de la actividad en un blog fruto de mi propio trabajo, dedicación y esfuerzo. Este blog me ha enseñado lo dura, y a la vez sencilla que puede resultar la constancia. Este pequeño rincón que tengo en Internet me ha ayudado a seguir la actualidad a cada paso y con lupa. Puede que hasta eche en falta aquellos días que llegaba agotado a casa y aún tenía que escribir el artículo del día siguiente en Pre-Periodismo. Y seguro que también añoraré la media de 37 visitas diarias que llevamos. Pero lo que ya queda impregnado, con tinta indeleble en el recuerdo, es el orgullo de haber sacado adelante un blog diario durante tres meses enteros día a día. Ha costado pero ha merecido la pena plasmar en la red aquella idea que una vez tuvieron José Pardina o Javier Fariñas, a ellos como a mis asiduos lectores (en mayor o menor medida) les dedico un artículo más, como fue aquél primero. Gracias y hasta cada lunes.
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