Billón

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Un billón de euros es mucho dinero. Y es un motivo de peso como para discutir y luchar por él en los tiempos que corren. Las previsiones indican que los países «contribuyentes» van a rechazar que el dinero se reparta en el los periféricos más pobres. Y es que, a ver quién tiene el valor de donar generosamente toda esa pasta gansa cuando hay tanta hambre llamando a la puerta. No cabe duda de que no habría mejor regalo de Navidad que hacer, pero es que, precisamente, no estamos como para ser generosos. En definitiva es una postura totalmente comprensible la de aquellos países que tiran del resto de Europa. Pero nos encontramos en uno de los países necesitados de esa ingente cantidad de dinero y tenemos que posicionarnos en el lado que reclama generosidad y solidaridad. Esperemos tener suerte y que la amistad con Merkel nos sirva de ayuda también en esta ocasión.