domingo, 1 de mayo de 2011

Buenas Nuevas


Príncipes de Windsor.

Aquellos que siempre miran el periódico o los informativos con recelo por miedo a las malas noticias que normalmente ocupan la actualidad, pueden sorprenderse y alegrarse porque esta semana, salvo excepciones, viene cargada de buenas nuevas. Empezando por la pasada boda real británica, visionada por todo el mundo, necesitado de actualidad desligada de catástrofes naturales o desesperantes previsiones económicas. Ya iba siendo hora de una boda de cuento en medio del frío y aparentemente sórdido mundo real. Y ha debido ser por eso, porque los periodistas ya estaban acostumbrados a las malas noticias, por lo que, en determinados programas de televisión, ha quedado al descubierto la falta de información en cuanto al estricto y previsible protocolo inglés.

Beato Juan Pablo II.
Además, el Papa del siglo XX por excelencia, el que perdonó a quien quiso asesinarle. Un Papa testigo de la segunda guerra mundial, y que padeció el sufrimiento de su Polonia natal. Un jefe de Estado que probablemente intervino en la caída del muro de Berlín. El Papa viajero, visitante de nuestro país por tres veces y propagador de los principios cristianos por todo el mundo, ha sido beatificado por el primero de los muchos milagros que nos esperan del Papa polaco al que se le puede decir: Juan Pablo, segundo, te sigue queriendo todo el mundo. Por si fuera poco hoy es el día del trabajador, tan atormentado en estos tiempos, y más si es autónomo. También el día de la madre, tan sacrificada y que cuida tanto pidiendo tan poco. El lunes se espera festivo para varias comunidades autónomas, aunque es sólo Madrid la que celebra el día en el que España se sublevó contra las tropas napoleónicas. Y si a algunos nos sorprendía lo tarde que había caído esta Semana Santa, faltan calificativos viendo que la Feria de Abril cae en Mayo. Pero como sabiamente dicta nuestro refranero: Nunca es tarde si la dicha es buena.

4 comentarios:

la Dama de Shanghai dijo...

¡Viva los novios! Tienes razón David, estábamos deseando tener una noticia agradable y en mayor o menor medida la hemos disfrutado, pero lo mejor, como dice mi hermano, que se casan por amor y además por la Iglesia, hablando de la Iglesia, qué emocionante la Beatificación de Juan Pablo II, sobre todo para los que nos sentimos testigos de su santidad.
La primera vez que visitó España mi hermano y yo tuvimos el privilegio de verle, mi hermano fue voluntario de los cordones de seguridad. Verdaderamente, una experiencia religiosa.

David Jiménez dijo...

Gracias, Dama de Shangai por haber aportado esa experiencia personal y por haber hilado de una manera tan impecable tos dos principales temas que trata el artículo de esta semana. Pero sobre todo participando tan activamente comentando y votando en la encuesta, gracias.

Elenita dijo...

Siento no compartir contigo, lo que tu denominas como "buena noticia". Para mi la boda que se ha celebrado la semana pasada, no es mas que una noticia, ni buena ni mala. E incluso debo decir, que hasta me escuece. Me rechinan los dientes, solo de pensar la cantidad de dinero que se habrá destinado a financiar esa boda. No obstante, no es que me incomode este enlace en concreto; sino todos los de personas que ganan su "sueldo" gracias a las arcas del pueblo. A veces menos es más.
Por otra parte, una boda es una boda, y siempre es bueno que dos personas que se quieran, se unan en tan importante momento.
El otro tema que tratas en el artículo, me parece maravilloso, exactamente igual de maravilloso que era el que siempre será nuestro papa. No había persona mas bondadosa y mas noble que él. Por una vez en la vida, y sin que sirva de precedente (jejeje) apoyo e incluso estoy orgullosa de este importante acto.

David Jiménez dijo...

Querida Elenita, aparte de que el humo de tomillo no es beneficioso para la salud (tú ya me entiendes) me alegro de que coincidamos en la noticia sobre Juan Pablo II. Y por supuesto que comprendo tu postura antes tan derrochadores eventos cuando hay tanta hambre en el mundo, pero cuando ocurren este tipo de cosas, yo elijo la postura del final de cuento que tantas veces hemos visto en el cine y tan pocas en la realidad. Y creo que lo mejor en esta vida es pedir un deseo cuando se ve una estrella fugaz y no dar la alarma por ver un meteorito ardiendo.