Cifras y letras

El humor que no falte. 

Y así se va el primer mes del año. Si empezó con la celebración del nuevo año gregoriano, casi termina con la del año nuevo chino, el año del dragón. Un dragón que parece haberse tragado ya 5.400.000 puestos de trabajo (mas los que salgan de Spanair). Leído en cifras no parece tanto, pero pruebe a pronunciarlo. ¿A que parece que se cansa la boca? Es una cantidad agotadora. Tanto por los dramas familiares que suponen, como por la depresión que provoca el saber que un país con tanto potencial como el nuestro (octava potencia mundial hace ocho años) tenga estas cifras y parezca que se erosiona, que se reblandece, o que se pudre económicamente. Mientras tanto, se suceden las protestas por los recortes en sanidad, educación, etcétera. Porque hay gente que cree que se puede salir de la crisis sin esfuerzo ninguno. Y entre las manifestaciones destacan las nuevas amazonas de los indignados. Se manifiestan por todo el mundo, incluso en contra de la mujer objeto, descubriendo sus «armas de mujer» y con «argumentos de peso» y unas «poderosas razones» que llaman bastante la atención porque van cubiertas únicamente por su lencería inferior, pintándose sus consignas por todo el cuerpo. Si no teníamos suficiente con el 15M y el movimiento Anonymous, los indignados patrocinan: the females. Un apunte, todas son mozas de buen ver, así que prepárense para las «manitetasciones» porque de esta moda los españoles no nos escapamos.

Alimento de neuronas. 

Y mientras los informativos se plagan de casos y juicios, y tramas, y tecnicismos judiciales varios, Camps, para dolor de muchos «socialistos», sale absuelto. Ahora es el turno del campeón de Blanco, a la vez que se sucede el goteo de información sobre Urdangarín y el del último presidente balear. Todo ello al margen de Karmah y Don Faisán que siguen con su rifirrafe por liderar la oposición. A ver si les dice alguien de una vez, que, por lo que respecta a la mayoría absoluta del país, no hay prisa. Pero la noticia en la que quiere hacer hincapié este aspirante a periodista es la preocupación de la dirigente alemana por las cifras de paro juvenil al reunirse con nuestro presidente. Es primordial tener en una empresa, personas que saben cómo hay que hacer las cosas para no caer en los errores del pasado, es decir, que tengan experiencia. Pero también es importante que la empresa se actualice, se innove y refresque, con las nuevas ideas que se les ocurren a los jóvenes con iniciativa y ganas tanto de trabajar como de aprender. Primero eran los abusos con los becarios, luego los contratos basura, y ahora que hay crisis nadie menor de 30 puede trabajar. ¿Pero qué tiene España en contra de los jóvenes? Bueno, o los jóvenes españoles en contra de trabajar, porque entre la fuga de cerebros y la generación ni-ni vamos bien servidos en mi generación. Menos mal que (providencia divina oiga) hubo un descenso importante de natalidad desde 1988 hasta 1991, y salen menos jóvenes hoy en día al mundo laboral. Pero no tenemos que olvidar los españoles, que se nos da tan bien desprestigiarnos, que no sólo hay mentes brillantes alimentadas de ahumados o hamburguesas, sino también y tan bien con aceite de oliva y jamón serrano.