Supervivencia mediática

75 años dejándose oír. 

Esta semana la voz de España cumplía 75 años. Esa compañera inseparable, que siempre que estamos dispuestos a escucharla nos entretiene y acompaña. Esa amiga que provoca que los sonidos del mundo inunden nuestra casa. El medio ni de foto ni de vídeo, sino de imaginación. El medio de la información inmediata, de la risa imaginativa, de la llamada íntima, del reportaje curioso, de la sintonía de toda la vida, de la canción que hacía tanto que no oía. Ese altavoz del pueblo, que nos susurra por las noches hasta que nos durmamos y que nos canta cuando se lo pedimos. La caja de las ondas, cumplía tres cuartos de siglo. Y ya ha podido venir la caja tonta o «el interné», que sobrevivirá a lo que le echen, porque es una superviviente. Y la radio, es otro medio por el que hemos podido oír que el Rey don Juan Carlos le ha concedido el Toisón de oro al presidente de Francia por su colaboración con España contra el terrorismo. La orden del Toisón de oro es del siglo XV, y su galardón ha sido ambicionado por muchos, además se caracteriza por su exclusividad y porque no es hereditaria, sino que, una vez se fallezca, se tiene que devolver a la Casa Real española. Por ello ha rodeado tanta polémica la entrega al presidente galo del vellocino de oro. Por mi parte, si el vecino del norte, nexo de unión con el resto de Europa, nos tiende una mano para acabar juntos con esta panda de desarraigados asesinos, diciendo incluso, que en la lucha antiterrorista no existen Pirineos, es de agradecer. 

Metáfora cinematográfica a Megaupload. 

En otro orden de cosas, ese medio de comunicación tan discreto que no se hace oír, sino escuchar, también nos retransmitió las colas de animales en el día de San Antón. Toda una fila de perros, gatos, pájaros, reptiles, y todo tipo de bestias disfrazadas de personas además de algún ser humano. Como también nos resumió la visita del presidente a Marruecos, los juicios de Garzón y de Camps, y que las agencias de calificación que siguen asustando a Europa, o que, según el FMI se prevé el final de la crisis para 2014, en vez de para este año como había predicho el año pasado. Pero lo peor estaba por llegar, y es que el viernes cerró Megaupload, la principal página de descargas de películas y capítulos de series televisivas de Internet. Lo que ha provocado un ataque en masa del movimiento Anonymous y de los piratas informáticos que asaltan las páginas web de los servicios judiciales americanos al igual que al FBI. Y este proyecto de periodista opina: Si la radio, que ha cumplido ya sus 75 añazos, puede convivir con iTunes (Bendito Steve Jobs, que en paz descanse) o Spotify, que es básicamente una radio personalizada en la que eliges las canciones que quieres oír además de poder descargártelas… ¿Por qué no puede convivir el cine con Internet? Si la prensa, que dice estar en recesión constante con su edición en papel, ha creado Orbyt, y se está digitalizando… ¿Porqué no se inventa algo la industria del cine? Lo que no puede ser, es que las productoras o las grandes superficies inflen tanto los precios como para que yo me tenga que gastar 20€ en una película que sólo quiero para pasar el rato, y recalco para pasar el rato, porque las que realmente quiero tener con su calidad, extras, etcétera, me las compro. Hay que aprender más de la radio, y sobrevivir a los tiempos y a las nuevas competencias innovándose. Porque si algo nos están enseñando los albores del siglo XXI es, que la batalla contra la libertad en Internet está perdida.