Testigos del otoño

Canal Imperial de Zaragoza

Es que esta semana no ha tenido ninguna noticia singular por la que caracterizar la actualidad. Si nos damos cuenta, las noticias que han ocupado las cabeceras de los medios de comunicación esta semana han sido las que tocan en la época en la que estamos. La economía sigue salpicando los diarios, y consecuentemente, los apoyos del Gobierno a las medidas y las críticas de oposición y sindicatos siguen haciendo hincapié en lo mismo. Pero las principales han sido dos. Por un lado el mal tiempo que tiene obligación de hacer en pleno otoño. Una meteorología extrapolable al otro lado del charco donde ha pasado Sandy arrasando. Y sus consecuencias siguen a la orden del día porque el fenómeno meteorológico descarga de lleno en la campaña electoral, aunque más que la propia tormenta, son las formas de actuar que han tenido los candidatos a tal efecto. 

Cementerio de La Almudena (Madrid)

Por otro lado nos encontramos con las costumbres, festejos y simbología de Halloween, Todos los Santos, y los Difuntos, por ese orden. En Madrid, la fiesta deja 4 muertos, muchas críticas y numerosas caries. Por supuesto que es una tragedia ¿tan grave como para suspender el alquiler de estos enormes recintos? No creo. Quizá Ana Botella quiera dar un toque de alarma ante lo peligroso que puede resultar que tanto niñato se junte en un mismo sitio donde sólo hay música, alcohol y mucha hormona danzando. Es cierto que ha habido víctimas, lo que agrava la situación, pero otras habrá. Porque no va a depender del ayuntamiento que siga habiendo macro-fiestas. Y estas cosas, desgraciadamente, pasan. Ahora es cuando cobran sentido todas esas frases que solemos decir cuando acudimos al campo santo para arropar a los que han perdido a alguien. Pero al margen de la polémica surgida de la noticia, en una visión general, se aprecia cómo la actualidad es la propia del tiempo. Y poco a poco irán asomando las fiestas del dulce, las luces y los regalos. Por lo pronto ya se están abriendo paso los perfumes en la publicidad. Será entonces cuando el frío y el mal tiempo será más intenso, y cuando las noticias vengan repletas de balances de compras y consumo, mientras las tradiciones y la religión se adueñan de los momentos más familiares y quizá entrañables de todo el año. Pero aún queda mucha hoja por caer y mucho otoño que disfrutar.