Un año más o menos

Campaña de las elecciones generales de 2011

Parece que fue ayer, pero no. Ya ha pasado todo un año. 365 días desde que salió elegido por mayoría absoluta, no un presidente, sino un partido que prometía el cambio en España. Así parece que toca mirar con perspectiva cómo nos ha ido. Dos huelgas generales convocadas por unos sindicatos que ya sabíamos que se lo iba a poner difícil. Descontento general por la ingente cantidad de recortes que incluso quebrantan el programa electoral de aquellas elecciones. Más paro, más recesión, desahucios, corrupción en Galicia y manifestaciones violentas... Claro que si tenemos en cuenta el favor de Europa que hace un año no teníamos, que los recortes han tenido que ser más drásticos de lo esperado porque el programa electoral se basaba en unos presupuestos falsos, y que el paro viene de una recesión en la que seguimos sumergidos y que lo sabemos porque contamos con un Gobierno que no se atreve a mentir sobre algo tan grave como que el país se va al hoyo... La cosa cambia. Se está intentando subsanar el problema de los desahucios con un parqué de pisos de renta baja. La corrupción política ha existido en este país siempre, sobretodo por parte de socialistas que han sido siempre muy de repartir lo ajeno. ¿Y qué sería de las manifestaciones de niñatos tirando pedradas a la policía si no se respondiera con un buen pelotazo de goma? Han marcado el horizonte en la mitad de 2013 para el final de la recesión (que no de la crisis). No se han bajado los sueldos, ni se han quitado coches oficiales, ni han despedido a funcionarios ministeriales o suprimido medios autonómicos o duplicidades burocráticas. Pero yo creo que es de lo malo lo mejor. Así de cruda está la política española.